¿Qué harías si llega a tu
correo electrónico un disco duro de 260 GB que incluye información ultra
secreta? Tal vez secretos de estado, una red de narcotráfico, o quién sabe,
vídeos escondidos de famosos.
El periodista de
investigación irlandés Gerard Ryle recibió anónimamente un correo que incluía
filtraciones de paraísos fiscales de todo el mundo. Offshore Leaks nació un
poco después.
Offshore leaks es una red de
periodismo investigativo que se dedica a la difusión e investigación de
personas y organizaciones que poseen cuentas bancarias en paraísos fiscales
(Panamá, Barbados, Seychelles, etc). Esta organización está a cargo del
Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ, por sus siglas
en inglés).
La base de datos de Offshore
Leaks permite a los usuarios navegar por más de 100,000 compañías secretas,
fideicomisos y fundaciones creadas en países costa afuera, como las Islas
Vírgenes Británicas, las Islas Caimán e inclusive Singapur.
Un trabajo arduo
La información recibida por Ryle describía los movimientos de capital de
unos 130.000 presuntos evasores de impuestos de todo el mundo: oligarcas,
vendedores de armas, especuladores financieros, personajes públicos, políticos,
y dueños de grandes fortunas. Todos estos datos hacen referencia además a más
de 120.000 empresas fantasmas y consorcios que se encuentran en paraísos
fiscales.
Según la periodista española
Mar Cabra, quien trabaja para el ICIJ,
ha sido muy complicado navegar por toda la información otorgada. Aproximadamente
100 periodistas en 60 países apoyan la labor de Offshore Leaks. Aún así, la
información es demasiado extensa para terminar de investigarla.
Sin embargo, los periodistas vinculados a la red analizan la información diariamente desde diversas partes del mundo. Personalidades como la “filántropa” española Carmen Thyseen, o el primer Ministro de Georgia Bidzina Ivanishvili se encuentran en la lista de personas que evaden sus impuestos mediante paraísos fiscales.
El servidor de Offshore Leaks
permite que cualquier ciudadano común ingrese a su base de datos para consultar
sobre alguna personalidad que le parezca sospechosa.
Quién sabe, tal vez ese
vecino que se compró un yate la semana pasada tenga una linda empresa fantasma en
un paraíso fiscal.
Enlaces de interés
Twitter del ICIJ
The Global Muckraker
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